Todas las personas, tanto hombres como mujeres, deseamos en menor medida tener un cuerpo sano y bonito. Para conseguirlo, la mejor opción es apuntarse a un gimnasio, donde podremos perder peso y tonificar nuestros músculos, además de mejorar nuestra autoestima.
Pero algunas personas, sobre todo las mujeres, se sienten un poco intimidadas ante la idea de apuntarse al gimnasio. La idea de llegar a un lugar lleno de gente más preparada, con un cuerpo ideal y, además, tener que hacerlo con ropas ajustadas les hace llenarse de inseguridades y miedos. Por eso mismo, hay que aprender a perder el miedo.
La mejor forma para empezar es apuntarse a alguna clase colectiva. De este modo tendrás un horario que seguir y te costará menos asistir. Con el tiempo, irás conociendo a tus compañeros y te sentirás más y más segura.
El segundo paso es entrar a la sala de máquinas. Aquí hay más gente y más libertad de movimiento, por lo que suele ser más difícil al principio. Lo mejor es consultar con un monitor para que te explique cómo empezar. Poco a poco descubrirás que nadie se fija realmente en ti o en tu cuerpo, todos van a lo suyo y si se dirigen a ti será para proponerte ayuda, así que no tengas miedo y apúntate ya.
