Cuando estás ante una competición próxima y necesitas preparar muy bien los entrenamientos, estás en un momento en el cual vas a tener mucha tensión en tu vida y por lo tanto, debes estar perfectamente entrenado, no solo a nivel físico, sino estar entrenado a nivel emocional.
Muchas personas se centran en cuidar solamente su cuerpo y no cuidan su mente ante un entrenamiento sin darse cuenta que la mente es la que hace que puedas tener mejor o peor condición durante todo el día.
Tú, puedes entrenar el aspecto psicológico de muchas formas, pero una de las primeras es que debes ser consciente de lo que te está diciendo tu cuerpo en todo momento. Esto habla de saber que está pasando a cardiaco, qué temperatura tienes en cada momento, si estás respirando de la forma correcta… Es una larga lista, por medio de la cual debes tener claro que sabes lo que tu cuerpo te está diciendo para no tener problemas mayores.
El cuerpo te habla
Toda la información que nos vaya dando nuestro cuerpo en cada uno de los entrenamientos, es la información que debes usar para saber cuáles son tus límites y en qué cosas debes mejorar cada día. Esto te hará ir aumentando el rendimiento de forma progresiva.
Otra cosa que nos desmotiva totalmente a la hora de hacer deporte son los pensamientos deportivos negativos. Por ejemplo corremos un tramo muy pequeño, pero en pocos minutos ya no podemos respirar, entonces nos paramos con la idea de que realmente no podemos hacer eso y al final dejamos el ejercicio de lado, sin embargo, si lo que intentamos es poder hacer ejercicio cada día pensando que cada día legaremos un poco más lejos aunque nos cueste, entonces podremos llegar donde queramos.
Si vas entrenando aspectos psicológicos de forma positiva, entonces en poco tiempo podrás verte haciendo muchas cosas que antes no pensabas.
