Las personas que se suman al mundo de las carreras y el running empiezan a familiarizarse con el término de ‘técnica de carrera’, y no es extraño que busquen distintas alternativas, trucos y tips para mejorar su rendimiento como corredores mediante la mejora y optimización de su propia técnica de carrera. Una de las propuestas más completas y extendidas es el denominado skipping ruso, y en esta guía sobre skipping de Pasión Runner se puede ampliar información sobre los distintos tipos de skipping y cómo introducirlos en la rutina de entrenamiento runnning.
Hay distintos consejos a la hora de mejorar la técnica de carrera, y en primera instancia es muy importante prestar atención a la postura. Una correcta postura nos ayudará evitar lesiones, reducir el cansancio y mejorar la forma en la que trabajan los músculos involucrados. Si a eso le sumamos los distintos ejercicios, técnicas y rutinas para el mejoramiento de la técnica de running, verás que en poco tiempo tendrás un desempeño mucho mejo en tus rutinas de carrera.
Consejos y tips para empezar a correr
Aquí encontraremos una amplia variedad de recomendaciones para mejorar la técnica de carrera, pero incluso antes de sumergirnos de lleno en las técnicas, es importante avanzar sobre las técnicas básicas. Toma nota de estos consejos si vas a empezar a correr, y podrás percibir mejoras en la técnica de carrera y mejor rendimiento en los ejercicios de entrenamiento.
Un primer consejo es cuidar el apoyo del pie. El impacto tiene que durar lo menos posible, y el pie de la pierna en el aire, debe estar en flexión dorsal, armado, con el tibial anterior activado y no dejarlo ‘muerto’. Esto fortalece la musculatura del tobillo y la vuelve reactiva para aprovechar mejor la energía. Al principio hay que estar muy conscientes de este tipo de movimientos, pero con el tiempo el cuerpo se acostumbra a este tipo de movimientos.
La postura también es muy importante para correr mejor, por eso el tronco debe estar siempre erguido, nunca echado hacia atrás o flexionado hacia atrás. Puede hasta recomendarse apenas una leve inclinación hacia adelante. Este tipo de flexión debe ser de la totalidad del cuerpo, en línea recta desde el suelo, de tobillo a cabeza. Esto adelanta nuestro centro de gravedad y permite aprovechar el impulso hacia adelante. Si nos inclinamos hacia atrás, nos estamos frenando en la carrera.
La zona superior, debe estar relajada. Rostro, cuello y hombros no deben estar tensionados mientras corremos. Los puños semicerrados no deben hacer una fuerza excesiva, porque sino estamos gastando energía innecesaria.
Un error bastante común en los corredores, es el de flexionar y extender los codos como si estuvieran haciendo ‘curl de bíceps’. Este es un movimiento totalmente innecesario que termina gastando energía.
Por último, el balanceo de las manos y los brazos también debe ser controlado. Las manos nunca tienen que superar la línea media del esternón, así evitamos una rotación excesiva del tronco que no nos permite aprovechar al máximo la energía física