Las lesiones también son parte del deporte, ya que es normal que alguna parte del cuerpo sufra de algún dolor o rotura al hacer mal un movimiento o al ser un malestar continuado y generado por el esfuerzo diario. Las lesiones se suelen producir mayormente al no estar en buena condición física, aunque por supuesto, se puede dar en personas bien preparadas. Para evitar que la probabilidad de lesionarse sea alta, hay que calentar antes de un ejercicio, y después de concluirlo, estirar bien cada parte del cuerpo.
Las lesiones más comunes son los esguinces o torceduras de los tendones y los músculos, sobretodo en las partes de los tobillos o las muñecas, lesión de rodilla o el telón de Aquiles, y aparte posibles fracturas o dislocaciones al recibir fuertes golpes.
Dentro de las lesiones deportivas se pueden encontrar dos grupos, las agudas y las crónicas.
- Las lesiones agudas son las que se sufren repentinamente, y lo que más se suelen dar son los esguinces de tobillo o de muñecos y se pueden detectar por un dolor fuerte y repentino, hinchazón en la zona, no poder apoyar o coger peso con la parte afectada y ver complicado el hacer algún movimiento de forma natural.
- Las crónicas sin embargo se producen en un periodo más largo debido al desgaste que el ejercicio puede ocasionar. Esto ocurre cuando se pueda notar un dolor constante durante el ejercicio, o incluso de sentir dolor durante el reposo.
Ya sabe, si va a practicar cualquier deporte tenga cuidado y trate de evitar lesiones, por muy mínimas que le puedan parecer.
