Esta disciplina es una de las más practicadas de manera masiva. En su país de origen, la actividad es realmente popular y es normal observar a la gente en los parques y/o plazas durante las mañanas, ejercitando esos movimientos tan lentos y a su vez, fluidos.
A pesar de sus movimientos tan suaves, cada uno de ellos está pensado especialmente para la defensa y la lucha cuerpo a cuerpo, sea desarmada o armada. Actualmente el Tai Chi es considerado como una práctica física y espiritual, beneficiosa para la salud y para la mente, ya que está constituida principalmente por una técnica de meditación. A pesar de ser un deporte de competición, muchas personas lo realizan por el simple hecho mejorar su salud, relajarse y distraerse, olvidando los problemas y/o analizándolos desde otro punto de vista.
Ocho condiciones para poder practicarlo
Como en toda práctica, existen sus condiciones y llevando al pie de la letra a éstas, los beneficios son mayores. Se recomienda siempre olvidarse de tener encima el reloj y/o celular; vestirse con calzado de fibras naturales, ropa suelta en especial en la cintura; practicar al aire libre y sobre hierba o tierra y, evitar las olas intensas de calor o tormentas grandes; esperar media horas después de haber practicado para ducharse y si has comido antes, tratar de que el organismo ya haya elaborado su digestión para poder sentirse realmente cómodos a la hora de comenzar con el Tai Chi.
Beneficios del Tai Chi
Los beneficios de esta disciplina se dividen en tres niveles: físico, mental y energético. En cuanto a nivel físico, la práctica hace que la fuerza y la flexibilidad del cuerpo aumenten, la respiración se corrija, las tensiones reduzcan y la circulación mejore. A nivel mental, se llega a un estado de serenidad, apertura, tolerancia y condescendencia. A nivel energético, la energía fluirá por el cuerpo fortaleciendo así al sistema inmunológico.