Existen un amplio número de métodos educativos que se denominan ‘alternativos’ porque utilizan estructuras diferentes al sistema educativo convencional. Este tipo de métodos apuntan a proporcionar a los niños y niñas herramientas muy diversas para lograr autonomía y una experiencia autodidacta. ¿Cuáles son los más populares de estos métodos alternativos? ¿Por qué resultan tan atractivos?
El fracaso escolar
La principal razón para optar por sistemas alternativos está basada en el alto índice de fracaso escolar. En algunas comunidades el nivel de fracaso en las materias escolares puede llegar a alcanzar un 30%. De acuerdo a los especialistas en educación, detectar de forma temprana las complicaciones educativas ayuda de manera notable a mejorar el rendimiento en la escuela secundaria. El fracaso escolar tiende a darse especialmente en la escuela secundaria, y en muchas ocasiones conduce al abandono precoz de los estudios.
Los dos aspectos donde más complicaciones se perciben son la comprensión lectora y la falta de habilidad para resolver cálculos matemáticos. Estos problemas los alumnos los van arrastrando en el tiempo y se forjan principalmente en los primeros años de la escolarización. Para sortear y enfrentar estas dificultades, los métodos de enseñanza alternativa apuntan a potenciar la autonomía y la independencia de los alumnos desde el primer momento. Se hace evidente que los alumnos deben tener un deseo de aprender para que la educación tenga éxito, y los docentes deben servir como facilitadores de los medios más adecuados para conseguir el objetivo.
Método Kumon
Creado por Toru Kumon, un profesor de matemáticas de origen japonés que deseaba ayudar a su hijo con las operaciones matemáticas, está basado en la comprensión lectora como base imprescindible para desarrollar una correcta capacidad de estudio. El método Kumon centra su atención en dos aspectos clave para el aprendizaje: la lectura y las matemáticas.
A través de la formación en estas dos áreas, el método de enseñanza alternativo apunta a que los alumnos adquieran habilidades suficientes para rendir al máximo en el estudio de cualquier otra asignatura. Con el método Kumon el alumno aprende a trabajar de forma independiente, sin la necesidad de una supervisión constante por parte de los padres o de los docentes. Al concentrar la atención en las tareas, el alumno van adquiriendo confianza para completar cada objetivo.
El desarrollo del método Kumon está dividido en distintos niveles. Abarca desde la educación infantil hasta el bachillerato. El estudiante debe realizar un primer examen para ver en qué nivel debe comenzar, y luego se va estructurando de manera que vaya adquiriendo los conocimientos requeridos para ir avanzando hacia los otros niveles. La educación siguiendo el método Kumon está presente en diferentes países del mundo, y en algunos establecimientos también se ha incorporado como un método de actividad extraescolar. Alcanza con practicarlo dos veces por semana, con una dedicación de media hora, para luego dedicarle apenas unos minutos durante el resto de los días.
Existen otras alternativas de métodos alternativos de enseñanza y lo seguiremos explorando a medida que llegan nuevas opciones y mecanismos para llevar adelante estos avances educativos que acercan la educación de una forma diferente.