Es posible que se pueda bajar de peso de esa manera, en función de la duración e intensidad de tu caminar y tu dieta. Sin embargo, consumir menos calorías a través de cambios en la dieta es importante para promover la pérdida de peso más efectivamente siempre acompañada del ejercicio.
Si agregas 30 minutos de caminata a paso ligero a tu rutina diaria, puede quemar alrededor de 150 calorías más al día. A ese ritmo, estarías perdiendo uso 150 gramos por semana. Cuanto más camines y más rápido sea tu ritmo, más calorías quemarás. Si bien cualquier actividad física es buena, obtendrás el mayor beneficio en términos de pérdida de peso de la actividad que es de intensidad moderada. Por lo tanto el objetivo es caminar de 5 a 6 kilómetros por hora. Puede aumentar gradualmente el ritmo si es necesario.
Una vez que hayas bajado de peso, el ejercicio es aún más importante, es lo que te ayudara a mantener el peso obtenido, incluso más que la restricción calórica. De hecho, los estudios muestran que las personas que mantienen su pérdida de peso a largo plazo es a causa de realizar actividad física regular. Así que sigue caminando, pero asegúrate de seguir también una dieta saludable.
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