Cuando estamos realizando el levantamiento de peso, es recomendable la necesidad de un período de descanso planificado dentro de la tabla de ejercicio diaria, la cual estarás ejerciendo durante dos o tres meses. Estos descansos controlados permitirán una recuperación tanto física como mental, preparando tanto al músculo como al sistema nervioso para futuros estímulos más fuertes.
Para la realización del buen ejercicio el descanso es fundamental por lo que deberemos, realizar un descanso completo, es decir de inactividad total durante una o más semanas (solo es para cuando exista un sobre entrenamiento importante o una lesión de la que uno se rehabilita), o bien un descanso activo mediante un período de descarga (entrenar pero con una disminución significativa, ya sea de intensidad, volumen o frecuencia, permitiendo que el músculo no se atrofie.
Podemos optar a entrenar con un volumen menor o reducir la cantidad de series. Deberemos ir bajando las series musculares dependiendo del ejercicio que estemos realizando, hasta volver a nuestras series originales.
En los casos en que las series ya sean de por si pocas, se podrán bajar el número de repeticiones, y aumentando el peso para que el musculo vaya acostumbrándose a mayor intensidad sin riesgo a lesión.
Por último, se puede optar por disminuir la cantidad de estímulos semanales, es decir que si empleamos 4 días a la semana, podemos entrenar 3 días y repartir los ejercicios de musculación. Siempre será conveniente repartir los días para que los mismos no queden muy pegados, sobre todo si son tan sólo dos estímulos.
