Es cada vez más habitual el empleo de la bicicleta como medio de transporte en la ciudad, tan habitual que en algunos lugares ha llegado como una moda que, esperemos, no sea algo pasajero. Muchos de estos nuevos ciclistas urbanos no han practicado antes este deporte. Desde aquí les ofrecemos una serie de recomendaciones de gran utilidad.
En primer lugar y, como es lógico, deberemos tener en cuenta que la bicicleta esté a punto: la presión de las ruedas ha de ser adecuada, comprobar el correcto funcionamiento de los frenos, la correcta altura del sillón y, por supuesto, revisar la colocación y funcionamiento de las luces.
Una vez que hemos comprobado el buen estado del vehículo deberemos plantearnos cuál es la ropa más adecuada para evitar peligros innecesarios. El casco es fundamental y su uso es obligatorio por ley, pero además del casco las gafas son muy importantes, protegen nuestros ojos de las agresiones que no son pocas, especialmente cuando circulamos por núcleos urbanos (polución, lluvia, viento, etc). Las gafas spiuk son un buen ejemplo de calidad a muy buen precio. Los guantes son otro de los elementos fundamentales, el impermeable (especialmente en determinada épocas del año) y, por último, el empleo de los reflectantes que facilita que el resto de vehículos puedan distinguirnos fácilmente especialmente en días oscuros o cuando circulamos por la noche.