Sara Carbonero descubre los beneficios que produce el yoga. Descritos a partir de su propia experiencia en Oporto. Lugar en el que practica yoga.
Beneficios del yoga
Muchas famosas son amantes del yoga. Vanesa Lorenzo ha compartido su pasión por esta disciplina en su libro Yoga: un estilo de vida. Cristina Pedroche también ha enumerado los beneficios relajantes de esta cultura que refleja una filosofía de vida. Ahora es Sara Carbonero quien a través de su blog relata que ha iniciado el nuevo año con una clara meta: integrar el yoga en su estilo de vida habitual: «Nunca es tarde. Es lo que me dijo el profesor de yoga cuando hace casi dos meses me presenté a mi primera clase un tanto nerviosa. Pensaba que sería la única que había escuchado hablar de esta disciplina ancestral pero que nunca la había puesto en práctica».
Sara Carbonero explica que nunca ha sido muy habitual de los gimnasios: «especialmente con ese tipo de gimnasio que más bien parece un club social donde la gente va a cotillear y a mirar de arriba a abajo el modelito de los demás».
Ahora Sara Carbonero vive en Oporto. Un lugar que le ha abierto una nueva perspectiva: «Cuando llegamos a Oporto pensé que era una ciudad ideal para practicar deporte al aire libre. Hay muchos parques y paseos para montar en bici y correr y además está la playa. No tenía pensado meterme en un gimnasio hasta que una mañana, desayunando debajo de casa, una amiga portuguesa me habló de un sitio en el que podíamos hacer yoga».
El yoga produce bienestar integral
La periodista explica que para que la cultura del yoga cale en uno mismo es fundamental poner fuerza de voluntad: «Como sabéis el yoga es una práctica que busca el equilibrio del cuerpo y la mente que busca el bienestar completo, físico y mental. Para empezar a hacer yoga tienes que querer cambiar algo y estar dispuesto a hacerlo. Debe ser algo así como lo de dejar de fumar. Te pueden ayudar pero el primero que tiene que querer es uno mismo».
Más allá del cambio físico que puede producir el yoga a través de un mejor estado de forma, el yoga también es un medio con el que cambiar el interior, a través de una educación del carácter y de los sentimientos. Y seguramente este es el principal valor de esta disciplina. Ya que el mundo interior de una persona puede llegar a ser todavía más importante que el físico.
En el tiempo que Sara Carbonero lleva compartiendo yoga ha experimentando logros que disfruta: «Me fui a casa con la sensación de haber tenido un flechazo y desde ese día no he podido parar. Hago tres clases a la semana e intento no saltarme ninguna. Ahora por lo menos consigo guardar el equilibrio sin que me de la risa, mantener la respiración y desconectar del todo en esos ratos».
El yoga es calma. Tiempo. Vida. Esperanza. Felicidad. El yoga es superación personal. Presente. Amor propio. El yoga es aprendizaje. Y karma que eleva tu espíritu. El yoga es mucho más que una moda. Aunque para algunas personas solo parezca algo temporal.
