Un cuerpo atlético y delgado sin demasiado esfuerzo es el anhelo de todos, pero pocas personas logran mantenerse en forma si no realizan un deporte y/o siguen una dieta estricta. Hay varias maneras de hacer ejercicio; ya sea ir al gimnasio, practicar deportes, bailar… ¡O realizar las tareas domésticas y otras actividades cotidianas que te permitirán ejercitarte sin darte cuenta!
Muchas veces nos lamentamos y quejamos al sacar la basura, lavar y colgar la ropa, cocinar, limpiar o barrer. Lo que no estamos teniendo en cuenta, es que las tareas domésticas y otras actividades que realizamos a diario como caminar, subir y bajar escaleras o andar en bicicleta, pueden ser más llevaderas y quemar más calorías que la misma cantidad de tiempo ejercitando en un gimnasio.
El mayor peligro de nuestra época es el sedentarismo, que hace que las personas cada vez estén menos activas y pasen su tiempo sentadas en un sillón mirando televisión o con el ordenador. Con esta realidad en mente, cualquier cosa que hagamos para ponernos en movimiento será más que beneficiosa para nuestra salud y ayudará a que nuestro cuerpo se active y pueda estar en forma casi sin darnos cuenta.
Un dato fundamental para tener en cuenta, es que cuanto más tiempo pasemos sentados y sin realizar una actividad, más posibilidades tendremos de comer “aperitivos” o tentempiés que echarán a perder todos nuestros esfuerzos por adelgazar. La ecuación es simple: a mayor actividad y ocupación, menor será la ingesta de comida innecesaria.
Algunos consejos: reemplaza el automóvil por la bicicleta o los rollers; o bájate del autobús algunas paradas antes y camina las últimas cuadras. Ofrécete para levantar la mesa y fregar, te permitirá ponerte en movimiento luego de comer y facilitará el proceso de digestión. Subir y bajar escaleras es otra gran actividad, mucho más saludable y beneficiosa que el elevador. Ya lo ves, ejercitar sin esfuerzo no es tan difícil: ¡Anímate!
