3 sobrecitos de té verde
1 / 4 a 1 / 2 taza de melaza
3 o 4 limones (jugo)
1-1/2 cucharaditas de sal marina
2 o 3 tazas de jugo de manzana (o su jugo de preferencia)
Miel al gusto
Preparación:
Colocar en un recipiente 1 litro de agua, dejar hervir, añadir la sal. Apagar el fuego y añadir las bolsitas de té. Dejarlas reposar durante 15 o 20 minutos. Luego se mezclan la melaza, la miel, el jugo de limón y jugo de manzana (o el que hayas escogido). Agitar bien. Añadir el té preparado y el agua para completar. Colócalo en la heladera y disfrútalo bien frío.
La melaza añade potasio, algo de glucosa entre otros beneficios, (asegúrate de utilizar la melaza real y no el jarabe de melaza que se vende como tal en algunas tiendas.) Por supuesto, añade la sal aporta el sodio. La miel es simplemente buena para nosotros, y también añade un poco de glucosa sin aumentar demasiado el índice glucémico. El limón es principalmente para el sabor, y además aporta vitamina C que no nos puede faltar. El jugo de manzana es, sin duda para aportarle un delicioso sabor, así que puedes agregarle el jugo que prefieras (por ejemplo, el zumo de uva sería riquísimo).