Tal vez tus obligaciones no te permitan hacer ejercicio en otro horario, y el hacer ejercicio nocturno es tu única opción. El ejercicio a esta hora del día no es tan recomendable, debido a que altera tu ritmo cardíaco.
Aunque esta no es la única razón por que no se recomienda hacer ejercicio en este horario, tan conveniente para muchísimas personas. En este posteo te contaremos porque no debes hacer ejercicio nocturno.
¿Por que no debes hacer ejercicio nocturno?
Muchos estudios han desvelado, que el hacer ejercicio nocturno no es saludable. Si bien el ejercicio ayuda a regular tu reloj interno. Lo que te permite tener un muy buen estado de salud. El practicarlo en forma intensa por la noche, hace que se incrementen tus probabilidades de sufrir fatiga, de padecer de sobrepeso, y de tener un envejecimiento prematuro.
¿Por qué es desaconsejable practicar ejercicio nocturno?
Cuando practicas ejercicio, el organismo tarda entre tres y cuatro horas en lograr su recuperación. Esta recuperación implica reducir la frecuencia cardíaca, recuperar el líquido que se ha perdido durante el ejercicio. También recuperar la energía que se perdió durante el ejercicio.
Si tu haces ejercicio nocturno, y lo haces en forma intensa, tu organismo necesitara de varias horas antes de que puedas ir a dormir.
¿Cuál es la mejor hora para hacer ejercicio?
Si lugar a dudas, la mejor hora para hacer ejercicio es por la mañana, o por la tarde temprano. El cuerpo tiene el resto del día para recuperarse, y lo mejor es que durante ese lapso de recuperación tu cuerpo sigue quemando calorías.
Consejo útil
Si no tienes otro horario para ejercitarte más que por la noche, lo ideal es que entrenes más días en la semana, pero por un lapso de tiempo menor. Eso permitirá que tu cuerpo emplee la mitad del tiempo en recuperar las energías perdidas, y en rehidratarse.
Si tienes libre los fines de semana, puedes entrenarte por la mañana, o en las primeras horas de la tarde. Eso te permitirá efectuar un ejercicio mucho más intenso, en el que tu organismo tendrá el tiempo suficiente para recuperarse debidamente.
